Milena Smit: “Me atraen los personajes con historias terribles detrás ...

28 Ene 2023

Milena Smit está feliz. Se ha podido comprobar durante toda la ronda promocional de La chica de nieve, su nuevo trabajo y la adaptación del fenómeno literario superventas que se verá en Netflix, en forma de miniserie, a partir del 27 de enero. Son seis capítulos en los que se desarrolla una trama en forma de thriller que comienza cuando Amaia, una niña de seis años, desaparece durante la cabalgata de Reyes de Málaga. Sus padres, desesperados, capitanearán entonces una búsqueda que se reactivará seis años después, cuando Miren, el personaje al que da vida Smit, reciba un vídeo en el periódico en el que trabaja en el que se aprecia a la niña jugando y con vida. 

Javier Castillo es el autor del libro en el que se basa esta historia. Publicado justo antes del confinamiento, se convirtió en el más leído durante aquellos meses oscuros y convirtió a autor y obra en un auténtico fenómeno de masas. El anuncio de rodaje llegó hace más de un año y tanto protagonista como creador forjaron desde entonces una estrecha historia de amistad que se ha visto reflejada en cada una de sus apariciones públicas conjuntas. La chica de nieve supone un impulso enorme en la carrera de Milena Smit, quizá de ahí su enorme alegría en las últimas semanas. La actriz se enfrenta aquí a su primer papel protagonista, tras el turbio secundario de Alma, Nico, también en Netflix; su participación en la ópera prima de Luc Knowles, Libélulas, y su Ana de Madres paralelas, el largometraje de Almodóvar que la convirtió en un rostro conocido a nivel mundial. No hay que olvidar a Mila, la mujer fatal a la que daba vida en No matarás, su debut en el largometraje, que le valió su primera nominación a un Goya. 

Tan solo tres años han pasado desde que la actriz se diera a conocer en el frenético thriller de David Victori y de ese género ha hecho Milena Smit su enseña. Con ella hablamos de todo ello días antes de su gran estreno. 

¿Estás feliz?

Lo estoy, estoy súper feliz. Con  ganas de que este proyecto salga por fin porque ha sido muy especial. Quedan tres días para que todo el mundo pueda disfrutar de él, lo que provoca una sensación que, no sé, supongo que se parece a cuando sabes que tu bebé ya va a nacer, le vas a ver la cara y todo el mundo te va a ir a ver con él al hospital. Es una sensación muy rara. 

Esta es tu segunda serie, después de Alma, pero aquí eres protagonista absoluta. ¿Cómo has vivido esa responsabilidad?

Ha sido una gran responsabilidad y la he vivido como tal. Al principio no te voy a negar que estaba todo el tiempo con la sensación de que me quedaba grande, que no iba a poder enfrentarme a este personaje. Pero la verdad es que estoy súper súper orgullosa porque al final, sabiendo el proceso de construcción del personaje que hemos hecho,  me tiré muchísimo tiempo rodando sola. Hay muchas escenas dónde sí que estoy con el personaje de Eduardo [Jose Coronado], con Aixa [Villagrán], que es la inspectora de policía, pero es aún así son pequeñas las apariciones que hago con el resto de personajes. El resto del tiempo estoy sola. Eso fue muy interesante para mí, el poder descubrir una faceta nueva en esta profesión. El camino está siendo todo el rato descubrir, descubrir, desde el primer momento que se presentó la oportunidad de dedicarme a esta profesión. Rodar tantísimo sola te da más seguridad en ti misma y muchísimas herramienta para intentar explicarle al espectador qué es lo que está sucediendo, aún sin palabras. Eso es un trabajo difícil, pero  muy bonito. 

Un fotograma de ‘La chica de nieve’

Niete/Netflix¿Conocías el fenómeno de Javier Castillo antes de llegar al proyecto?

Sí lo conocía, pero no lo había leído. De hecho, parece que estaba destinada a que fuera así. En cuanto me llamaron para hacerlo me advirtieron de que no leyera el libro, para que no interfiriera el personaje de la novela con el que iban a adaptar para la ficción. Este libro estaba ambientado en Nueva York y los protagonistas manipulan armas y demás, así que cuando lo trasladan a España eso no tiene sentido. Aquí en España raro es que tengas una pistola en tu casa. 

Afortunadamente

Afortunadamente, desde luego. El libro ya está escrito y es cierto que a un lector cuantos más ingredientes se le den para construir esa historia en su imaginación, más agradecido está. En la ficción es preferible, en cambio, llevarlo al lugar más realista posible. Había muchas cosas que limpiar para que la serie fuera creíble y yo, desde luego, desde el minuto en que empieza la serie me creo la historia en todo momento. También nos hemos permitido tomar algunas licencias. Por ejemplo, Miren se salta unos cuantos procedimientos para llegar a la verdad, había que ayudar un poco al personaje. La serie no deja de ser ficción y creo que hemos conseguido un resultado muy realista, muy cercano. En todo momento estás muy metido en la historia y empatizas mucho con prácticamente todo los personajes. Con esto se van a llevar una sorpresa los espectadores.

Mencionas que Miren se salta algunos límites para conseguir lo que quiere. Es una periodista atrevida que parece no tenerle miedo a nada. ¿Tienes algo en común con ella?

Yo sí diría que tengo algunas cosas, pero también que Miren me ha hecho ser más valiente de lo que era antes. Te voy a corregir en una cosita, que creo que es muy importante. Miren no creo que no le tenga miedo a nada, tiene una necesidad de encontrar a esta niña porque realmente siente que si da con ella se va a encontrar a sí misma, por un trauma que ella tiene del pasado y que ha dejado en una situación de la que de alguna forma no puede pasar página. Lo que he intentado trabajar es cómo, sin ella quererlo, se mete tanto dentro de este caso porque así no está tan presente en su trauma. 

Milena Smit como Miren, la protagonista de 'La chica de nieve'

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Se puede establecer un paralelismo con tu personaje de Madres Paralelas, otra mujer marcada por una experiencia terrible. ¿Por qué te atraen este tipo de papeles con historias traumáticas u oscuras a sus espaldas?

Fíjate, me atraen mucho porque creo que se les tiene que dar la voz que no tiene. No es tanto que me atraigan, es como si de alguna forma nos atrajéramos las dos. Aprendo muchísimo de cada personaje que interpreto, creo que crezco y soy mejor persona. Es verdad que en mi carrera han sido casi todo mujeres traumatizadas que han vivido situaciones desfavorables, muy injustas, y pienso que mientras tenga la oportunidad de darles esa visibilidad tan necesaria, siempre las voy a priorizar. 

A pesar de esto, da la sensación de que eres una persona muy divertida. ¿Te ves protagonizando una comedia?

Siempre he pensado que una comedia se me daría fatal. Y tengo que decir que nunca me ha llegado. La verdad es que cada vez tengo más ganas de hacerla porque, aunque me encanta interpretar esos personajes tormentosos, a veces digo: ‘por favor, una comedia para soltar un poco y hacer reír a la gente’. No estaría mal. 

¿Eres de las actrices que se lleva el personaje a casa cuando termina el rodaje? 

He de reconocer que sí y que me encanta. Supongo que también es porque llevo muy poquito en la profesión todavía. Es algo que muchas veces desearía aprender a gestionar, aunque cada vez creo que lo llevo mejor, lo trabajo con mis coach. Sí que es verdad que me gusta convivir con los personajes, pero de repente llegas a casa y a lo mejor has tenido una escena dura y es complicado. El hecho de hacer ese exorcismo con el personaje y dejarlo en el set yo todavía no he aprendido a hacerlo. Cuando entro en un rodaje suelo convivir con el personaje durante el tiempo que dure, estoy bastante metida en el mood, y casi todos mis papeles han sido mujeres traumatizadas, pero en absoluto significa que esté deprimida. Simplemente intento empatizar, investigar, hago ejercicios a nivel personal con el personaje para ver cómo se siente. 

¿Te da miedo la reacción de los fans del libro? 

Durante el proceso del rodaje estaba más con el cumplir la expectativa con Javier. Ahora, a tres días del estreno, estoy cagada. Que es la novela más leída de la pandemia, por favor. Espero que haya hecho algo bien. A mi novio le tengo frito diciéndole: ‘¿tú crees que esto le va a gustar a la gente?’. Él siempre me dice que a la gente que le guste le encantará y que a quien no le guste ya está. Va a haber de todo y es de lo que estoy tratando de mentalizarme. A medida que se suelte la serie se me quitarán los nervios. 

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