Italia respira a costa de Ucrania

SILVIA RIVED

Actualizado 12/09/2023 - 23:00 CEST

Italia ha salvado los muebles en Milán. Tras la tormenta, las dudas y los miedos, por fin ha llegado algo de calma al país mediterráneo. Luciano Spalletti ha logrado esta noche su primera victoria como seleccionador de la Azzurri y se pone segunda del grupo C, viva en la pelea por la clasificación para la Eurocopa. Italia y el técnico respiran tranquilos a costa de Ucrania, que desciende a la tercera posición.

Tras el empate a 1 ante Macedonia, la Azzurri se la jugaba en San Siro contra la selección ucraniana, quien compite también por el segundo billete a la competición. El primero parece asignado a Inglaterra. La vigente campeona de Europa podría haberse complicado mucho su estancia en la próxima Euro, lo que, dado los precedentes, sería un auténtico drama.

Para evitar más sustos, Spalletti tenía muy claro que los cambios eran necesarios. Así pues, ha incluido cinco rotaciones en el once inicial. Entre ellos, ha dejado en el banquillo al capitán y anotador del sábado, Immobile y ha apostado por Frattesi. Y desde luego, no se equivocaba el técnico con la presencia del nerazzurro.

La imagen de Italia ha sido totalmente distinta desde el comienzo del enfrentamiento. Ha comenzado fuerte, dominando y siendo superior a su rival. Con una primera llegada clara de Raspadori, que también se estrenaba en la alineación, la Azzurri ha demostrado que quería solventar las carencias ofensivas. Así pues, no ha tardado en despejar esas dudas y anotar el 1-0. En el minuto 12 se resbalaba Sudakov en su campo y recuperaba Zaccagni. El de la Lazio encaraba y se la dejaba de maravilla a Frattesi, que solventaba con la derecha por el palo corto de Bushchan.

Los italianos querían más y en el 29', el mismo futbolista, ponía el 2-0, en una jugada con rechaces en el área que era anulada por fuera de juego. Ha sido el VAR quien finalmente ha dado por bueno el tanto.

No todo iba a ser un camino de rosas, ya que al borde del descanso Yarmolenko recortaba distancias, tras un error en el despeje de Dimarco. El ucraniano remata a puerta vacía.

Mucho más tranquila ha sido la segunda mitad. Los de Spalletti seguían intentando ver portería con llegadas claras en el área ucraniana (hasta 23 remates), pero no han logrado finalizar ninguna para sentenciar. Mientras, Rebroy cambiaba fichas con el fin de empatar el duelo. Sin éxito. Ha apretado en los últimos minutos con una acción peligrosa de Konoplya, cuyo cabezazo se ha marchado por el lateral de la portería de Donnarumma.

Sin un sufrimiento excesivo y sin tiempo para más, Spalletti celebraba la victoria con la que se quita un problema mayúsculo.