Señales de alerta del déficit de atención: ¿cómo saber si un niño o ...
Esta condición corresponde a un trastorno que afecta al menor de edad en su día a día, concretamente en sus actividades y relaciones sociales.
Cuando un menor de edad le cuesta prestar atención, se mueve constante en los momentos que no debe hacerlo, actúa impulsivamente o interrumpe a los demás, es probable que padezca déficit de atención.
Según el National Institute of Mental Health, este trastorno afecta las relaciones sociales y el rendimiento en las etapas de su desarrollo, tales como la primaria o bachillerato. Es por eso que los acudientes o padres deben estar atentos a los síntomas para poner en marcha un plan de prevención con antelación.
La definición médica de esta condición es un trastorno asociado con un patrón continuo de falta de atención, hiperactividad o impulsividad. Puede iniciar en la infancia, aunque se desarrolla con el paso de los años. En ese orden de ideas, las señales de alarma que presentan los pacientes con falta de atención son:
No prestar atención a los detalles y cometer con frecuencia errores relacionados por el descuido a las responsabilidades en la escuela u otras actividades.Dificultad en mantener atención en actividades, como juegos o tareas, lo cual se agudiza en las conversaciones o acciones de larga duración.Problemas al escuchar atentamente cuando se le habla directamente.Dificultad en seguir instrucciones o terminar labores diarias, como lo son las tareas, quehaceres del hogar o mantener una actividad en secuencia.Aparte de estos, hay otras señales para quienes padecer hiperactividad e impulsividad:
Se mueve cuando está sentado.Se levanta de la silla y se va a otro lado cuando no debería hacerlo.Corre, da vueltas o se trepa en los muebles en situaciones inapropiadas.Dificultad en participar en pasatiempos en silencio o actividades que no impliquen hablar.Temblar constantemente.Hablar o hacer ruidos sin descanso.Responder a las preguntas antes de que se las terminen de hacer.Acabar las oraciones que otras personas están diciendo.Dificultad para tener paciencia al esperar su turno en una fila.Interrumpir a otros o entrometerse en conversaciones o actividades ajenas.Para recibir un diagnóstico médico, el paciente tiene que haber presentado las señales de alerta antes de cumplidos los 12 años. Máximo hasta los 16 se les diagnostica el trastorno si los síntomas son constantes. Además, estos deben presentarse en más de un entorno; es decir, además de la casa o la escuela.
La condición puede confundirse por consecuencias del estrés, trastorno del sueño, depresión u otras afectaciones. Es por ello que, para tener una lectura fidedigna, los profesionales de la salud realizan los siguientes exámenes: