Día del trabajo, ¿por qué se celebra el 1 de Mayo?

El Día del Trabajo es uno de esos que se tienen claramente marcados en los calendarios y muy esperados, pues curiosamente para muchas personas es un día libre. Sin embargo, aunque en México suele ser uno de los días de asueto o puentes por excelencia, en realidad esta fecha recuerda muchos de los movimientos obreros gracias a los cuales se obtuvieron derechos como jornadas laborales de ocho horas y vacaciones. Para entender un poco más te damos todo el contexto de por qué se conmemora el Día del Trabajo.

Los trabajadores de la minería han sido grandes referentes de los movimientos laborales.Stepehen Philpott / Unsplash

Comúnmente los calendarios la denominan simplemente como el Día del Trabajo, pero esta fecha que se celebra en al menos 80 países también es conocida como Día Internacional de los Trabajadores, ya que los antecedentes que le dieron origen surgieron en distintas latitudes donde se registraron manifestaciones por parte de grupos de obreros. En el caso de México, esta jornada está muy relacionada al gran estallido de las manifestaciones de 1886 en Chicago, cuando comenzaron a exigir mejores condiciones laborales.

El 1 de mayo de aquel año, distintos grupos de obreros, trabajadores y los incipientes sindicatos convocaron a manifestaciones y protestas para exigir mejores condiciones laborales, pues en aquel entonces el único respaldo legal evitaba que tuvieran una jornada de 18 horas continúas. Las exigencias de aquel llamado incluían una jornada de trabajo de 8 horas, derecho a la huelga, libertad de expresión y asociación y salarios justos.

Por supuesto que cimbraron el panorama, y las protestas se extendieron a lo largo de varios días, incluyendo una de la icónica plaza Haymarket, donde la llegada de un grupo policíaco elevó los ánimos hasta llegar al fuego abierto que dejó varios detenidos, unos cuatro muertos y más de 50 heridos, según la enciclopedia de Chicago. Algunos de los detenidos, conocidos más tarde como los mártires de Chicago, fueron condenados a muerte y se convirtieron en el rostro del movimiento que tuvo eco a nivel global.

Solo tres años después de aquellos sucesos, en 1889, la Segunda Internacional, una federación de partidos socialistas y laboristas, establecieron el 1 de mayo “como homenaje a los Mártires de Chicago y como jornada reivindicativa de los derechos de los trabajadores”, según un artículo del gobierno de México. De acuerdo con la misma información, en el país, el Día del Trabajo se celebró por vez primera en 1913 con una manifestación. Pero fue hasta 1925 cuando el día se promulgó el día de forma oficial.

El Día del Trabajo se celebra el 1 de mayo en conmemoración a la huelga que estalló ese día en Chicago en 1886.Sol / Unsplash

Aunque la conmemoración del Día del Trabajo es global, en nuestro país ha tenido un desarrollo peculiar, pues las manifestaciones obreras han tenido un efecto particular en el derecho laboral y las garantías de los trabajadores. Por ejemplo, la constitución mexicana de 1917 fue la primera que incluyó el derecho a huelga, uno de los grandes logros del movimiento obrero.

Otro de los efectos de movimientos obreros nacionales, como la huelga de Cananea y otras manifestaciones históricas, que contribuyeron al desarrollo del artículo 123 constitucional el cual señala que “toda persona tiene derecho al trabajo digno y socialmente útil”. Además señala que la jornada laboral es de ocho horas y establece el salario mínimo y define las condiciones del acceso a la seguridad social.

Pero los alcances no se han detenido ahí, pues las garantías que se han alcanzado laboralmente se extienden hasta años recientes. En 2019, por ejemplo, se reconocieron en la Ley Federal del Trabajo a las trabajadoras del hogar y apenas en 2021 se prohibió la modalidad de outsourcing para contratar personal. Ese mismo año la legislación laboral sumó a sus contenido todo lo relacionado al home office y el trabajo a distancia señalando el derecho a la desconexión digital.

Normalmente dejamos de lado las garantías que tenemos como trabajadores hasta que enfrentamos alguna situación como un despido. Por eso es importante que se conozcan los derechos básicos y las leyes que los respaldan, que en conjunto delimitan las condiciones del empleo que se tiene. Entre estos derechos laborales básicos que se deben conocer se incluye salario, jornada de trabajo, días de descanso, vacaciones y aguinaldo, y todos ellos deben estar precisados en un contrato individual o colectivo. Información del gobierno de México señala que “en ningún caso podrán ser inferiores a las fijadas en la Ley”.

Otro de los derechos básicos es la denominada “prima de antigüedad”, que garantiza un pago por el tiempo trabajado en una empresa, las incapacidades por distintos motivos así como los motivos para ser despedido, los cuales contemplan ser debidamente informado y recibir el pago de indemnizaciones al momento de terminar la relación laboral.

La evolución histórica que ha rodeado al Día del Trabajo no ha escapado del ojo del cine y el ascenso de los trabajadores ha sido tema central a lo largo de la historia y por todos los rincones del mundo, dejando un nutrido legado de filmes enfocados a los logros de la clase obrera, personajes vinculados a los triunfos y una que otra comedia que, desde el humor, recuerdan que hay varias brechas que aún deben ser reducidas. Enlistamos tres películas imperdibles.

La huelga, 1924

En plena era del cine mudo, el cineasta Sergei Eisenstein realizó un filme que retrata una huelga ocurrida en 1903 en la era prerrevolucionaria. La cinta sigue a los trabajadores de una fábrica que están organizado una huelga para exigir mejores condiciones en su lugar de trabajo. La opera prima de Einstein es todo un clásico no solo por el sentido colectivo de la lucha sino por su secuencia final que muestra un montaje del ataque violento contra los obreros y con imágenes de animales asesinados.

Tiempos Modernos, 1936

La comicidad de Charles Chaplin hace más ligera la crítica hacia la industrialización y las condiciones de la clase obrera. Cobijada por el humor, la cinta es considerada como un cuestionamiento a los horarios excesivos y la carencia de garantías a las que se veían sometidos los trabajadores de aquella época. Aunque en el filme nunca se comparte qué se produce en la fábrica donde se desarrolla la historia, se considera una fuerte crítica a la supuesta liberación que implicaría la llegada de la era industrial.

Matewan, 1984

Nominada al Oscar a Mejor Fotografía esta cinta de 1984 sigue las protestas mineras ocurridas durante la década de 1920 en Virginia Occidental en Estados Unidos. El filme se centra en el control de las compañías que ofrecen salarios muy bajos y pocas garantías, en especial contra la comunidad negra de Estados Unidos, en aras de mantener precios competitivos de los minerales. El drama estalla cuando los mineros de Matewan organizan una huelga que se torna violenta.