Tigre logró su primer triunfo del año ante Central Córdoba en Victoria

01/03/2024 18:25hs. Actualizado al 01/03/2024 21:35hs.

Se esperaba que el empate ante Vélez, en el que Tigre convirtió sus primeros dos goles del campeonato, fuera un punto de partida... Y así fue. El Matador obtuvo su primer triunfo del año ante Central Córdoba en Victoria y le dio un respiro a Néstor Gorosito con un triunfo que vale mucho más que tres puntos.

Con esta victoria, Tigre sigue encaminado hacia su recuperación, saliendo de lo más profundo de la zona B para igualar en puntos al que ayer fue su rival. Eso sí, no se le hizo fácil. Resulta que, por lo menos hasta el gol, Tigre estaba sufriendo más de la cuenta. Y aunque Pipo pedía explícitamente que se respetara la idea de llegar al área rival con la pelota dominada, sus jugadores decidieron abusar del recurso del pelotazo que, para colmo, no estuvo ni cerca de generar una ocasión de peligro. No fue sino hasta que bajó los humos, se serenó y empezó a plasmar un poco de fútbol que el Matador consiguió el tan ansiado gol.

En esta ocasión, el conjunto de la Zona Norte repitió goleador, pues su joyita Ezequiel Forclaz marcó el tanto del empate contra el Fortín, y ahora rompió varias rachas más con un sablazo al palo más lejano de Luis Ingolotti (quien anoche reemplazó al lesionado Andrés Mehring). Por su parte, los dirigidos por Abel Balbo, salvo por alguna jugada aislada durante el primer tiempo -hubo buenos rendimientos de Torrent y Atencio- no pudieron inquietar a su rival y volvieron a firmar una floja actuación, hecho que en Santiago comienza a preocupar: el Ferroviario sólo ganó uno de los ocho partidos que disputó en la Copa de la Liga.

En Victoria las cosas parecen empezar a cambiar. Es cierto que hasta hace unas fechas Pipo estaba en la cuerda floja, pero con el empate ante Vélez y la posterior victoria volvió a hallar vitalidad en el banco matador. Tigre no fue una luz, pero en ambos duelos logró salir a flote con una personalidad incuestionable. Y quizás “incuestionable” sea la palabra que mejor define los últimos duelos de un Matador que, aun con poco, se renovó y se ilusiona con un mejor presente.

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