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4 hora atrás
Sarlo

Escritora, ensayista y crítica literaria, Beatriz Sarlo se consolidó como una de las voces más influyentes del pensamiento contemporáneo, capaz de intervenir en debates literarios, académicos y políticos. Su trayectoria estuvo marcada por una constante búsqueda de comprensión crítica de la sociedad y la cultura, así como por su habilidad para vincular las tradiciones intelectuales con los desafíos del presente.

Junto con Carlos Altamirano y Ricardo Piglia crearon Punto de Vista en 1978, en el momento más álgido de la dictadura militar. Esta revista se convirtió en un espacio de resistencia intelectual y en un referente para la discusión crítica en Argentina y América Latina. En sus páginas aparecieron algunas de las primeras traducciones de autores como Raymond Williams, E. P. Thompson y Richard Hoggart. Además, publicaron fragmentos de la obra de Pierre Bourdieu, contribuyendo a desarrollar una sociología de la literatura en Argentina. Escritos a cuatro manos con Altamirano, los libros Literatura y Sociedad, Conceptos de sociología literaria y Ensayos argentinos. De Sarmiento a la vanguardia dejaron plasmada esa contribución.  

Sus primeros libros son una referencia ineludible para pensar la sociología de la cultura. Una primera serie se conforma con El imperio de los sentimientos (1985), Una modernidad periférica (1988) y La imaginación técnica (1992). Escribía Sarlo, tiempo después, que en ese momento de optimismo por la apertura democrática le parecía entrever en la cultura una clave para pensar la diferencia argentina. Otro imprescindible es La máquina cultural. Maestras, traductoras y vanguardistas. Una segunda serie posible reuniría a Escenas de la vida posmoderna, La intimidad pública y La ciudad vista; en los tres se pregunta por las transformaciones contemporáneas de la cultura y la subjetividad. Otro conjunto de libros se centra en la literatura argentina: Borges, un escritor en las orillas; Escritos sobre literatura argentina; Zona Saer, entre otros.  

En 2003, Sarlo sorprendió a muchos al aceptar una columna en el diario Clarín, un movimiento que amplió el alcance de sus intervenciones públicas. Desde allí, abordó los temas más urgentes de la agenda nacional e internacional, combinando su bagaje intelectual con un lenguaje accesible. Aunque esta decisión generó controversias, reafirmó su compromiso de dialogar con una audiencia más amplia y de incidir en los debates del espacio público. En ese nuevo rol, tuvo también un papel en la discusión política, que se plasmó además en sus libros La pasión y la excepción (2003), y La audacia y el cálculo, sobre la figura de Néstor Kirchner. 

En el ámbito académico, Beatríz Sarlo pensó, diseñó y creó, también con Altamirano, la Maestría en Sociología de la Cultura y Análisis Cultural, con un programa pionero que articulaba enfoques teóricos y metodológicos para estudiar la cultura en su complejidad. En este espacio formó a generaciones de docentes e investigadores, promoviendo una visión crítica y rigurosa que trascendió los límites de la academia. Desde allí, donde seguiremos leyéndola, la despedimos hoy con profundo pesar.  

Marina Moguillanksy

Beatriz Sarlo, Escuela IDAES, Escuela Interdisciplinaria de Altos Estudios Sociales, Homenaje, Maestría en Sociología de la Cultural, Marina Moguillansky, Sociología de la Cultura

Nota actualizada el 17 de diciembre de 2024

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