San Lorenzo ganó con Muniain como figura y goleador

6 días atrás

Olé

28/09/2024 14:33hs. Actualizado al 28/09/2024 17:19hs.

Lo ganó antes de empezar. Al menos Iker Munian, porque en su primer partido como titular en San Lorenzo, pisó el césped convencido de que la única opción era el triunfo y fue el alma, el conductor futbolístico y el goleador para que el equipo de Romagnoli se reencuentre con el triunfo con el 2-1 ante Banfield.

El festejo de Iker Muniain en su primer gol en San Lorenzo. Fotobaires

Antes de que comience el partido, el vasco llamó a todos sus compañeros y, a metros del círculo central, dio una charla motivacional. Cuando la bocha comenzó a rodar, se hizo cargo: la pidió, la manejó, jugó e hizo jugar. San Lorenzo fue más que el Taladro desde el arranque, pero le costó encontrar el gol...

Bustos tomó una pelota perdida en el borde del área y rompió el cero, pero llamó el VAR y advirtió por una mano en la jugada previa. Al rato, Alexis Cuello cayó en el área y Sebastián Martínez, que estaba al lado, cobró penal. Muniain se adueñó de la ejecución y la cambió por gol.

Era todo azulgrana, pero una desatención de Campi en un pase atrás cambió todo. Es que de ahí llegó la primera clara de Banfield y en la continuidad una mano de Luján en el área que José Carreras observó desde Ezeiza para que Sepúlveda, desde los doce pasos, pusiera la parda.

El equipo de Munúa nunca supo cómo poder entrar en partido, extrañó horrores al Kitu Díaz, quien se lesionó la fecha pasada, y encima terminó el primer tiempo con uno menos por la doble amonestación de Núñez. Así, otra vez, el partido se tiño todo de azulgrana...

El empate de Banfield ante San Lorenzo. Fotobaires

El Pipi metió mano en el entretiempo y Muniain pasó de extremo a doble cinco en la segunda mitad, pero de todas formas pisó el área rival. Tras una gran jugada colectiva del Ciclón, el español llegó por sorpresa y definió con total autoridad para volver a poner a su equipo arriba, mostrar el 80 en su camiseta, levantar otra vez al público...

También recibió su bautizmo, cuando recibió un murrazo sobre el lateral pero eso no impidió que cuando salió, a poco del final, se llevara una más que merecida ovación.