Rafa Nadal regresa a Roland Garros 722 días después y tiene su ...

Han pasado 722 días desde la última vez que Rafael Nadal pisó la central Philippe Chatrier. Fue en la final de 2022 contra Casper Ruud que significó su decimocuarto entorchado en la tierra de París.

Nadal regresa esta tarde ante Alexander Zverev a la que se ha convertido en una especie de segunda casa desde su debut en Roland Garros en 2005.

"Aquí la voy a liar", le dijo a Jordi Robert Tuts, su hombre de confianza en Nike cuando en 2004 estuvo por primera vez en las instalaciones del grande galo invitado por la multinacional americana. Y bien que la ha liado.

Sus 14 títulos, con 112 partidos ganados de los 115 disputados, con 74 víctimas, serán difíciles de igualar para cualquier generación posterior. Rafa se alojaba sus primeros años en el hotel Villa Marquís y ahora lo hace en el Intercontinental de la Plaza de la Ópera. Sus primeras cenas eran siempre en el restaurante Pizza Pino de los Campos Eliseos y en la actualidad tiene al Café de la Paix como su sitio favorito para celebrar sus victorias.

Se estrenó en el evento con una camiseta sin mangas y unos pantalones piratas. Esa imagen juvenil dio paso a una más conservadora, la que siempre acompañó a la figura de Roger Federer.

"Si no tuviera esperanzas de jugar bien, no estaría aquí. Este sitio es mágico para mí y tengo menos limitaciones", afirma.

Tras ganar en todos sus entrenamientos a rivales como Sebastian Korda, Stan Wawrinka, Daniil Medvedev, Mariano Navone y Holger Rune, Rafa se refugió ayer por espacio de 90 minutos en el complejo del Jean Bouin, anexo al recinto de juego, reservado ya para la competición oficial.

Nadal, que cumplirá 38 años el próximo 3 de junio, se adentra en un terreno desconocido para él. En sus 18 participaciones anteriores, el contrincante de más ranking en una primera ronda fue John Isner, en la edición de 2011.

El gigante de Greensboro ocupaba el puesto 39 y llevó al balear hasta el quinto set. Zverev es el cuarto de las listas y hace ocho días levantó el trofeo de campeón del Masters 1000 de Roma.

Pase lo que pase, Rafa ya ha dejado entrever con palabras y hecho que está dispuesto a volver a la tierra de París en 2025. Amelie Mauresmo, directora del certamen, confirmó que tenían preparado un homenaje para él que ha quedado suspendido por la negativa del tenista español."Nadal quiere dejar la puerta abierta. No le vamos a presionar a hacer nada. Es su decisión cuándo quiere el reconocimiento y por eso no lo vamos a hacer este año", explicaba Mauresmo.

Los asistentes este lunes a la Philippe Chatrier no tendrán la seguridad de ver por última vez a la leyenda en caso de derrota. Sascha ha sido uno de los 74 rivales con los que ya se ha enfrentado en Roland Garros.

Fue en la semifinal de 2022 y que terminó con el alemán saliendo de la pista en muletas con el tobillo roto. "Quería jugar una vez más con él. No quería que mi último recuerdo con Rafa fuera el día en que me lesione", reflexiona Zverev, acusado de malos tratos por su expareja aunque sin sentencia firme. "Por eso puede competir en el cuadro porque se le supone inocente", dice Mauresmo.