La lista de buenas películas a nuestro alcance es prácticamente infinita, pero, dependiendo del género y de las preferencias personales de cada uno, la lista de recomendaciones varía por completo de un cinéfilo a otro. Todas tienen cabida: desde la comedia más divertida hasta una excelente distopía de ciencia ficción, pasando por comedias románticas, una epopeya histórica o cine de terror. Sin embargo, en lo que se refiere a películas que todo el mundo debería ver al menos una vez en la vida, independientemente de su afinidad por el cine, tampoco hay tantas. Ésta es una de ellas.
Obra maestra atemporal de Frank Capra, ¡Qué bello es vivir! no solo es una de esas películas que han de verse como mínimo una vez en la vida, sino que estamos en la mejor época del año para hacerlo.
Estrenada en 1946, ¡Qué bello es vivir! nos presenta la historia de George Bailey, interpretado James Stewart, un hombre que no ha logrado ninguno de los principales objetivos que se había puesto en la vida. El sueño de George siempre fue recorrer el mundo, pero sus obligaciones familiares lo empujaron a ocupar el puesto de director general de la empresa de su padre. Así, cuando, se pierden 8.000 dólares de las arcas de la empresa en Navidad y se ve con un pie en prisión por malversación de fondos, el hombre no ve la salida y se plantea acabar con su vida. En respuesta a sus oraciones, el ángel Clarence (Henry Travers), que aún no se ha ganado sus alas, es enviado para evitar el suicidio de George.
Nominada a cinco premios Oscar y considerada una de las mejores películas de la historia, el filme no fue un gran éxito en su paso original por las salas de cine, aunque, con el paso del tiempo, ha adquirido el status de clásico. En ella, Capra, que sigue siendo considerado uno de los más grandes cineastas estadounidenses, supo combinar como ningún otro la melancolía con lo entretenido y al mismo tiempo reflejar la actualidad social. Para el cineasta, ¡Qué bello es vivir! era una de sus películas favoritas y reconoció que la proyectaba a su familia cada Navidad.
El crítico Alejandro G. Calvo reconoció que sería la película que elegiría si solo pudiera ver una una y otra vez en la vida: "Sería una película con un mensaje positivo y que te alegre. Que te haga feliz. ¡Qué bello es vivir! Capra habla de la familia y de la amistad de una forma muy bonita. Y yo creo en la familia y creo en la amistad".
Hasta el día de hoy no ha perdido nada de su relevancia, así que, si quieres escapar del estrés de la Navidad y recordar lo que es realmente importante estos días, así como el resto del año, lo tienes realmente fácil, puesto que la película está disponible en varias plataformas: bajo suscripción en los catálogos de Movistar Plus+, Prime Video y Filmin y también de forma gratuita a través de Plex.
