Robert Eggers resucita el mito vampírico: “Nosferatu inventó el cine ...
Los vampiros se han convertido en un mito tan popular que el cine les ha utilizado hasta pervertir el imaginario original. Lejos quedan las estacas de madera, las balas de plata, los ataúdes y el ajo para alejarles. Mucho más lejos queda una de las mejores aproximaciones al mito vampírico, la que hizo F.W. Murnau en el clásico del expresionismo alemán de 1922, Nosferatu. A pesar de ser una de las películas más importantes e influyentes de la historia del cine, su legado parece olvidado en un presente donde los vampiros se han convertido hasta en sexis fenómenos adolescentes protagonistas de novelas románticas como Crepúsculo, donde el vampiro era guapo, misterioso… ¡y brillantes!
Para el director Robert Eggers, autor de películas como La bruja o El faro, y uno de los mayores exponentes del nuevo boom del cine de terror de los últimos años, el vampiro tenía que volver a dar miedo de nuevo, y por eso decidió que quería resucitar a quien, para él, dio origen a todo, el Nosferatu de Murnau con el que lleva “obsesionado desde que tenía nueve años”.