Las Nike Cortez Light Pumice son unas zapatillas con un color ...

Las Nike Cortez Light Pumice son unas de esas zapatillas con un color tan especial que merecen ser destacadas. Su tono es un azul pastel, a juego con los últimos iPad Air que ha presentado Apple, que hace que sean incluso mejores que unas zapatillas blancas de cara a este verano.

La próxima versión de la popular silueta se presenta en un elegante tono azul claro, con la parte superior confeccionada con una base de malla y revestimientos de ante. Un tono complementario de plata reflectante aterriza en el swoosh del panel y el talón, mientras que la marca adicional se puede encontrar en la etiqueta de la lengua, la plantilla y el logotipo Nike bordado en el talón.

La zapatilla descansa sobre una entresuela blanca con una raya negra y una suela de goma marrón claro, mientras que los cordones azul claro a juego y los dobladillos plateados unen la zapatilla para un acabado limpio.

Nike Cortez Light Pumice

Tras cumplir 50 años en 2022, las Cortez son una de las zapatillas más antiguas de Nike y uno de los modelos más longevos de todo el mercado. Su atractivo ha perdurado durante generaciones, creando de algún modo una línea que incluye a los Ángeles de Charlie originales, Eazy-E, 'Forrest Gump' y Kendrick Lamar.

Junto con las Air Jordan 1 y las Air Force 1, las Cortez son una de las zapatillas más cruciales de la historia de Nike. Pero a diferencia de esos dos modelos, que llegaron con pocos años de diferencia en la primera mitad de los 80, las Cortez son anteriores a Nike como empresa. No sólo fue el primer éxito de la empresa cuando empezó a fabricar sus propias zapatillas, sino que preparó el terreno para que Nike lo hiciera cuando Blue Ribbon Sports era principalmente un distribuidor de Onitsuka Tigers.

Debido a su papel en la génesis de Nike, así como su continua relevancia en las décadas venideras, la Cortez tiene una de las historias más interesantes que se pueden encontrar para una zapatilla de deporte - y eso es antes de entrar en la polémica con adidas o convertirse en un prominente símbolo de algunos pandilleros...

Antes de que Nike vendiera sus propias zapatillas, Phil Knight y Bill Bowerman fundaron la empresa con el nombre de Blue Ribbon Sports y distribuían principalmente zapatillas Onitsuka Tiger en Estados Unidos. Bowerman diseñó él mismo las Cortez en esta época anterior a Nike, pero Onitsuka fabricó la zapatilla y concedió a Blue Ribbon Sports los derechos exclusivos de distribución de la zapatilla en Estados Unidos.

Bowerman tomó la esponjosa entresuela de la Spring Up y la fusionó con la suela exterior de la Limber Up en un intento de crear la zapatilla definitiva para carreras de larga distancia. El talón de la zapatilla se elevó para ayudar a proteger el tendón de Aquiles de posibles lesiones, mientras que la parte superior de resina de nailon tejida «Swoosh Fiber» resultó ser más ligera y resistente que el cuero, además de ofrecer resistencia a la humedad y mantener su forma sin estirarse.

La zapatilla para carreras de larga distancia empezó llamándose «TG-24» en 1967, y un año más tarde recibió el nombre menos clínico de TG-México como guiño a los inminentes Juegos Olímpicos de 1968 en Ciudad de México. TG-México dio paso entonces a Azteca, pero Adidas amenazó con demandar porque estaba planeando el lanzamiento de su propia zapatilla conocida como Azteca Gold. Así que fue el cuarto nombre el que finalmente se quedó, y Knight contó la historia de cómo Cortez llegó a ser el apodo en sus memorias «Shoe Dog».

«Agravado, conduje montaña arriba hasta la casa de Bowerman para hablar de todo», escribió Knight. «Nos sentamos en el amplio porche, mirando al río. Aquel día brillaba como un cordón de plata. Se quitó la gorra de béisbol, se la volvió a poner, se frotó la cara. ¿Quién era aquel tipo que les dio una paliza a los aztecas? Cortés", le dije [refiriéndome a Hernán Cortés, el conquistador español]. De acuerdo. Llamémoslo Cortez'».

Blue Ribbon Sports cerró 1967 con unos ingresos de 84.000 dólares, que Knight atribuyó en gran parte a las Cortez. En 1970, la demanda de la zapatilla era tan alta que Onitsuka no podía abastecerla. Con el tiempo, Knight y compañía se dieron cuenta de que la empresa estaba dando prioridad a que las Cortez estuvieran disponibles en su mercado doméstico japonés. Para satisfacer a sus propios clientes, Blue Ribbon empezó a estudiar la posibilidad de fabricar la zapatilla ella misma en 1971. Sorprendentemente, durante una visita a la fábrica de Nippon Rubber en Kurume (Japón), Knight recibió la primera muestra con el Swoosh de Nike después de comer, el mismo día que la pidió.

Las Nike Cortez Light Pumice se van a poner a la venta en las próximas semanas y se espera que su precio ronde los 90 euros.