Otro fuerte aumento de las naftas para reducir el atraso de los ...
Con la devaluación del dólar oficial, el aumento de los combustibles estaba cantado. La noticia se supo el miércoles al mediodía en el multitudinario almuerzo del Día del Petróleo que se celebró en el Sheraton. Allí, la petrolera Shell avisó que aumentaba sus precios de nafta y gasoil un 37%.
Y el flamante presidente de YPF, Horacio Marín, deslizó que la petrolera que domina el mercado con más del 50% de participación, seguiría sus pasos. Finalmente, lo hizo por la noche, tocando sus precios en un porcentaje similar.
El aumento, fuerte en su magnitud, tiene impacto cascada en el resto de los precios de la economía.
Con la suba, la nafta súper de Shell en la Ciudad de Buenos Aires pasó de $446 a $612 y el litro de nafta premium roza los $800.
En la provincia de Buenos Aires, la YPF ubicada sobre la Ruta 2 en la ciudad de Castelli mostraba los siguientes precios en sus carteles: $659 el litro de nafta súper, $ el de premium, $679 el gasoil común y $800 el diésel especial.
En la medianoche del miércoles, Axión también se sumó a la medida, con un incremento en línea con el de las otras petroleras.
En la Ciudad de Buenos Aires, el litro de nafta súper de Axion cotiza a $582, mientras que la quantium asciende a $701. En tanto, el gasoil común cotiza a $667 y el especial, a $775.
Este miércoles volvieron las colas en las estaciones de servicio de las marcas que aún no se habían plegado al nuevo incremento. Aunque en algunas YPF de la Capital Federal directamente no vendían nafta, ni súper ni premium.
Decían que se les había acabado por la alta demanda. En tanto, había algunas colas en las de Axion, que mantenían el precio “viejo”.
El anterior aumento se registró el viernes 8 de diciembre. En esa ocasión, las petroleras aplicaron subas de entre 15% y 30%. Así, con ambas incrementos, el precio de los combustibles en los surtidores trepó 67% en menos de una semana.
El 25 de noviembre también se había producido otro aumento generalizado, liderado por YPF y Axion. El incremento había sido de 10%, luego de otro de 9,6% a principio de ese mes.
En el año, los precios de los combustibles aumentaron 235%, por encima de la inflación que se calcula en 190% para este año.
Durante la gestión de Massa al frente del Ministerio de Economía, el precio de los combustibles estuvo congelado en el año electoral.
Desde noviembre de 2022, el Gobierno incluyó a los combustibles en el acuerdo Precios Justos, y lo renovó en abril de este año, con subas de 5% hasta que se acordó el congelamiento en agosto, después de la derrota de Sergio Massa en las PASO.
En noviembre, tras la derrota en el balotaje, los precios se despertaron.
Pero aún con esta última suba, los combustibles en Argentina se encuentran entre los más baratos de la región en un ranking que encabeza Uruguay, donde el litro vale casi dos dólares. La nafta en Argentina está casi a la par de EE.UU. si se toma el dólar oficial de $ 800: se vende a US$ 0,950.
El gobierno de Javier Milei tiene previsto desregular el precio de los combustibles para que que quede liberado y se rija por la competencia en el mercado.
Eduardo Rodríguez Chirillo, secretario de Energía, buscará modificar esquemas tarifarios y liberar el precio de los combustibles, según la plataforma de La Libertad Avanza y las diversas declaraciones públicas de los referentes del frente en los medios.
“Se debe apuntar a una fluctuación libre, sin el control indirecto que hoy ejerce el gobierno en el mercado a través de YPF”, afirmó Rodríguez Chirillo, en una entrevista al portal especializado Surtidores.
La intención es llegar a que la nafta valga US$ 1 el litro, como sucedió históricamente. Así, habría un nuevo ajuste durante el verano y otro más cerca de marzo o abril.
DS