Madonna en Rio: Cómo se negoció uno de los shows más grandes ...

14 días atrás

La superestrella del pop finaliza su Celebration Tour con un concierto gratuito en la playa de Copacabana el 4 de mayo. Así fue como se logró.

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Foto Billboard

Madonna durante un concierto de su Celebration Tour en la O2 Arena de Londres, el 15 de octubre de 2023. Kevin Mazur/WireImage for Live Nation

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Imagina la escena: Una de las artistas pop más grandes de la historia está en medio del Palais Garnier, la imponente casa de la Ópera de París. Con sus ojos azules mirando fijo la cámara, dice una frase completamente improvisada: “Brasil, allá voy”.

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Pero en ese entonces, en noviembre de 2023, no era para nada seguro que Madonna llevaría su Celebration Tour a Brasil. Al contrario, se rumoreaba que sería una misión casi imposible por razones técnicas.

“En ese momento, pensamos: ¿Por qué no le pedimos que grabe la frase ‘Brasil, voy para allá pronto’ como un extra para el comercial?”, dice Pedro Smith, jefe de relaciones estratégicas de marca de Itaú, el banco más grande de América Latina, cuya campaña de centenario tiene como estrella a Madonna. “Ella expresaría un interés recíproco en hacer que el show sucediera si aceptaba. Bueno, ella grabó ese discurso, ¡pero todavía no teníamos una manera de usarlo!”

Correspondía al banco usar sus contactos para hacer que fuera posible. Pero se les acababa el tiempo.

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“Al día siguiente de la grabación, vimos su show en París y nos dimos cuenta de que la estructura sería complicada de adaptar a una multitud grande como la que queríamos. Por eso, Guy Oseary [el mánager de la cantante] nos echó un balde de agua fría”, dice Smith.

Madonna - Figure 2
Foto Billboard

La semana siguiente, el legendario empresario Luiz Oscar Niemeyer de Bonus Track, un “jugador clave” en el proceso, apareció en escena. Para aquellos que no están familiarizados con las complejidades del negocio de la música, Niemeyer es un pionero en el mercado de conciertos internacionales en Brasil, responsable de la asistencia récord al show de Paul McCartney en el Maracanã en 1993 (y de todas las visitas subsiguientes de McCartney a Brasil) y de la actuación de los Rolling Stones en la playa de Copacabana, entre muchos otros eventos históricos.

Así que había dos jugadores: el banco más grande de América Latina, que ya tenía una relación cercana con Madonna, y un productor experimentado acostumbrado a tratar con los nombres más grandes del espectáculo. Pero el destino a veces hace sus jugadas.

“Yo ya había intentado traer a Madonna en 2006, sin éxito, y ya había estado hablando con Live Nation, responsable del Celebration Tour, pero Madonna tuvo ese problema de salud el año pasado, y la gira se pospuso”, explica Niemeyer, o “LON” para los más cercanos a él.

A finales de 2023, Madonna volvió a la acción, grabó el comercial y vendió todas las fechas en Europa, pero Niemeyer, que se había ido de vacaciones a principios de año, también tuvo que lidiar con su propia salud. El productor sufrió un grave accidente, fue hospitalizado y quedó fuera de acción. “Me derrumbé completamente”, dice riendo.

A mediados de febrero (poco más de dos meses antes de la fecha del espectáculo), las negociaciones se intensificaron con Niemeyer de vuelta en acción. “Nos hicimos muy cercanos [a Niemeyer] e intercambiamos mucha información, como un grupo de trabajo para hacer posible este show, porque Itaú tenía un contrato con Madonna y Bonus Track, con Live Nation”, dice Smith. “Era sábado, domingo, a veces a las 3 de la madrugada, y Luiz Oscar y yo estábamos en reuniones con equipos de fuera de Brasil”.

Y los equipos para todo lo relacionado con Madonna, por supuesto, son bastante rigurosos. “Tenemos que ofrecer un show que cumpla con el nivel de producción que presenta en todo el mundo, naturalmente adaptado para un espacio mucho más grande. Solo cuando tuvimos aprobado el redimensionamiento de esta estructura, los patrocinios, la transmisión televisiva y las cuestiones técnicas el cuerdo finalmente se cerró”, explica Niemeyer, destacando que las filtraciones sobre el show que se apoderaron de Internet en las semanas previas al anuncio oficial no interfirieron en las negociaciones.

Según él, desde el principio la idea era que el concierto en Princesinha do Mar cerrara el Celebration Tour como “un gran regalo para los fans brasileños”. “Fue una gran elección: es sábado, a mitad de semana tenemos un feriado y más gente puede visitar la ciudad”, dice Niemeyer.

Esperamos que Madonna lo disfrute también.

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