Lautaro Martínez: el goleador de la Copa que le genera un ...

MIAMI, (enviado especial).– Aquellos años en los que se discutía la inclusión de jugadores en la selección, sobre todo los que arrastraban una buena racha en el fútbol doméstico, quedó sepultado por este exitoso proceso de Scaloni. Cada citación o rotación dentro del equipo titular (el DT casi nunca repite el once de un partido a otro) no tiene reproches en un país donde se hizo costumbre objetar las decisiones de cualquier entrenador, aunque sea campeón del mundo. El doblete de Copa América y Mundial, sumado a este presente alentador, le dieron a esta selección “inmunidad” ante cualquier atisbo de cuestionamiento.

Por eso, nadie le criticó al DT la presencia de Julián Álvarez como el 9 titular en los dos primeros partidos. El planteo que ideó Scaloni para el inicio de este certamen le abrió la puerta al delantero del Manchester City y dejó en el banco a Lautaro Martínez, quien venía de un gran año en su club, el Inter, con el que fue goleador, campeón y figura.

Después de Qatar, Scaloni sabía que debía iniciar un proceso de renovación y mantener el “hambre” de su plantel si quería seguir como protagonista. Lo dejó claro cuando le puso puntos suspensivos a su continuidad, a fines de 2023: “Necesito pensar porque la vara está muy alta, está complicado seguir ganando”.

Marcelo Bielsa, que conduce a un Uruguay renovado y es uno de los referentes del DT de Pujato, describió ante una consulta de LA NACION el trabajo que Scaloni ha logrado después de llegar a la cima en el desierto qatarí. “La ambición está intacta y la evolución también. La adaptación al paso del tiempo está contemplada dentro del trabajo de conducción excelente que se observa desde afuera”, elogió.

Apenas terminó el partido en Miami que selló el primer puesto del Grupo A y que marcó el viaje a Houston para buscar las semifinales, este jueves, Martínez sentenció: “Trabajo para demostrarle al entrenador que estoy listo para entrar cuando me necesite”. Cualquier técnico del mundo necesitaría a un 9 como Martínez. Pero Scaloni evaluará en estos días si sigue de titular o si vuelve Julián.

Lautaro se abraza con Di María; Garnacho llega a la fiestaLA NACION/Anibal Greco

En la calurosa noche de Miami, Garnacho se recostó bien pegado sobre la izquierda. Allí se asoció con Di María, que se movía desde la derecha hacia adentro, con Lautaro plantado como 9. Sin la fórmula de los primeros dos partidos de esta copa, el despliegue en el retroceso de Julián Álvarez y la presencia de Messi, que flota entre los centrales como el hombre más adelantado, Scaloni paró en el primer tiempo a tres delanteros bien marcados.

Di María es el dueño del equipo cuando no está Messi. Casi todas las acciones de peligro durante la primera etapa pasaron por su zurda. Después de una primera parte cerrada, el segundo tiempo arrancó con otro tono. Al minuto se selló una gran combinación con la marca de esta selección. Quince toques en total. Los últimos tres fueron de Lo Celso para Di María, quien habilitó de primera a Lautaro. El 9 definió con sutileza por encima de Gallese. En el festejo fue al banco a abrazarse con el capitán, que se perdió el partido por lesión.

Sobre el final llegaron otras dos claras de Martínez. Una se la tapó Gallese. En la siguiente, en el minuto 41, recibió una habilitación exigida de Enzo Fernández, luchó el pique con Aldo Corzo, le ganó y, cuando volvió a salir el arquero, la picó.

Un gesto típico de LautaroLA NACION/Anibal Greco

En el primer partido, frente a Canadá, el delantero del Inter ingresó a los 75 minutos por Julián Álvarez y a los 89 marcó el 2-0 tras una gran habilitación de Messi. En el duelo cerrado frente a Chile volvió a ingresar por el jugador del Manchester City a los 72 minutos. Y quebró el cero con un gol a los 88 tras un rebote dentro del área. Anoche, arrancó de titular y marcó un doblete. Cuatro goles en 118 minutos jugados.

El Toro llegó a los 28 goles en la tabla histórica de los goleadores de la selección. Todos bajo la era Scaloni al frente. A los 26 años está a solo tres tantos de Di María y Gonzalo Higuaín, a 6 de Maradona y a 7 de Hernán Crespo. “Il fuoriclasse”, como lo llaman en Italia, ya se sacó de encima la espina de haber perdido su lugar de titular indiscutido en Qatar. Tampoco lo afectó arrancar esta Copa América desde el banco. A la salida, Lautaro resumió: “Hice una gran temporada en el club y me sentía listo para sacarme la espina de lo que fue el Mundial. Me preparé bien para la Copa América y lo estoy demostrando”.

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