Dembélé, un regreso caliente
Se empeña el PSG en magnificar una rivalidad contra el FC Barcelona que no se acaba de entender. Los gritos de ‘puta Barça’ cuando apenas habían tres jugadores azulgrana inspeccionando el césped más de dos horas antes del partido y asemejar al club azulgrana con Darth Vader y el imperio galáctico parece totalmente exagerado.
Dembélé también estuvo en el foco. El ex del Barça celebró su gol de forma efusiva justo delante de donde se situaba la afición barcelonista, que lo entendió como una provocación y al final del encuentro, ya con las gradas vacías, entonó cánticos insultantes hacia el futbolista francés. Dembélé echó más leña al fuego a su ya tensa salida el pasado verano.
En el pasado, el Barcelona pagó por 105 millones de euros más 40 en variables al Borussia Dortmund por Dembélé y le puso un salario de jugador diferencial que nunca estuvo acorde a su rendimiento. La llegada de Xavi le dio un rol de jugador clave porque el técnico egarense le concedió galones y le tuvo una confianza ciega. Por eso, el técnico del Barça se mostró decepcionado y hasta un punto traicionado cuando le comunicó que se iba al PSG justo cuando el Barça estaba negociando para renovarlo otra vez.
Ya fue una odisea su anterior renovación, cerrada pese a las reticencias de la dirección deportiva dirigida por Mateu Alemany, que perdió la paciencia con el futbolista y su agente. El club azulgrana llegó hasta a plantarse y apartó a Dembélé de un partido (ante el Athletic en Copa) para que tomara una decisión definitiva sobre su continuidad. “Hemos esperado mucho tiempo y la situación no es fácil. Hace cinco meses que Mateu Alemany está en conversaciones con el jugador y su representante, y no podemos esperar más; o renueva o se busca una solución”, dijo Xavi en ese momento.
En su celebración, Dembélé no tuvo en cuenta las dos veces (en 2017 y en 2020) que sus compañeros en el Barça salieron con camisetas con su nombre antes de un partido para darle apoyo después de una de sus múltiples lesiones. Tuvo hasta quince en su etapa azulgrana, que lo llevaron a perderse 119 partidos. Jugó 185 de los 304 posibles. Para ser uno de los fichajes más caros en la historia, sus números tampoco son extraordinarios porque marcó 40 goles y repartió 42 asistencias. De hecho, en el PSG también conocen bien la falta de acierto de Dembélé porque su gol contra el FC Barcelona fue el segundo en toda la temporada en 35 partidos.
