Si Colón logra absorber la presión, sigue siendo el gran candidato
Colón obtuvo una victoria fundamental para lo que viene. El triunfo ante Gimnasia de Mendoza puede marcar un antes y un después pensando en las últimas 10 fechas.
Y es que más allá de no jugar bien, el Sabalero venció al puntero de la zona y le cortó una racha de 12 partidos sin perder y de cinco victorias consecutivas. Por lo cual, el rival al que le ganó, magnifica aún más el triunfo del equipo dirigido por Rodolfo De Paoli.
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El vaso medio lleno tras el esperado regreso al triunfo de Colón
En el momento indicado, el Rojinegro cortó una racha de tres derrotas al hilo y por primera vez lo hizo ante un rival directo. Por primera vez, Colón ganó una verdadera final y venció a un equipo que estaba arriba.
Y lo ganó por empuje y actitud. Le faltó fútbol pero le sobró corazón. Colón peleó el partido como no lo hizo en los dos anteriores, sobre todo ante Gimnasia y Tiro.
La diferencia entre un partido y el otro fue diametralmente opuesta, respecto a la intensidad y el compromiso. El Sabalero se dio cuenta que quizás estaba ante la última oportunidad de pelear por el primer puesto de la zona.
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La realidad indica que si Colón logra absorber la presión, es el máximo candidato a ganar la zona. Le sobra plantel y variantes, a diferencia de sus rivales.
Si bien es verdad que perdió a Ignacio Lago por lesión. Colón en este mercado de pases potenció y mucho a su plantel, mientras que los otros equipos sumaron lo que pudieron y algunos perdieron figuras, como el caso de San Telmo con Adrián Fernández.
En este mercado de pases, Colón sumó a: Oscar Garrido, Genaro Rossi y Joel Soñora. Y además retornaron al club: Andrew Teuten, Brian Farioli y José Neris.
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Y se fueron Cristian Vega quien siempre fue suplente y lo mismo aplica para Nicolás Leguizamón. Por lo cual, claramente potenció sus recursos futbolísticos y al entrenador le sobran variantes.
En el partido ante Gimnasia de Mendoza, el uruguayo Neris fue titular y en el banco Colón contaba con: Rossi, Javier Toledo y Axel Rodríguez. Demasiado si se lo compara con los otros equipos.
En el Lobo mendocino que marcha puntero, salió Luis Silba e ingresó Aaron Spetale. En nombres, está claro que Colón es muy superior a sus adversarios.
Así las cosas, si el Sabalero, logra hacerse cargo de su chapa de candidato y sabe jugar con esa presión, es indudable que se perfila como el máximo favorito.
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Se sabe que en el fútbol, todo cambia rápidamente. Y es por eso que a nadie le podría llamar la atención, que Colón después de sumar tres derrotas al hilo, ahora pueda hacer la inversa y encadenar varios triunfos consecutivos.
La primera final la ganó y el sueño está más intacto que nunca. Ahora depende de los jugadores y del cuerpo técnico lograr el objetivo que hasta no hace mucho tiempo estaba al alcance de la mano.
Pareció alejarse con las derrotas y los rendimientos evidenciados, pero ahora nuevamente está en carrera. Los 10 partidos que faltan son una eternidad y todo puede pasar. Colón está vivo y va por todo, le sobran razones y argumentos para coronar su objetivo.
